jueves. 28.03.2024

El Audi R8 LMS con el que Audi Sport consiguió la quinta victoria en las 24 Horas de Nürburgring esconde una historia inusual. Representa un potencial del que se benefician los equipos cliente de la marca en todo el mundo.

El coche con el que Pierre Kaffer, Fran Stippler, Dries Vanthoor y Frédéric Vervisch ganaron las 24 Horas de Nürburgring el pasado día 23 de junio no era un coche nuevo. Ni siquiera un coche con un año de antigüedad: casi dos años antes de su victoria en Nürburgring, el Audi R8 LMS con número de chasis AS4SAFGT201700089 participó en su primera carrera. Fue la tercera cita del campeonato Blancpain GT Series Endurance Cup. La carrera de seis horas tuvo lugar en el circuito de Le Castellet (Francia), el 24 de junio de 2017. En aquel momento, el equipo Audi Sport Team ISR inscribió este Audi para los pilotos Jamie Green, Frank Stippler y Kelvin van der Linde. Hasta la fecha, el coche ha realizado tres test y ha participado en doce carreras, con cuatro equipos diferentes. Entre ellas, las 24 Horas de Spa, las 24 Horas de Nürburgring y las 8 Horas de California, en dos ocasiones cada una. En el momento en el que cayó la bandera a cuadros en Nürburgring, este Audi R8 LMS había recorrido un total de 29.836 km, teniendo en cuenta clasificaciones y carreras, durante dos años.

El modelo de competición –de especificación GT3– está basado en el coche de calle y comparte con él el 50% de sus componentes. El chasis Audi Space Frame (ASF) multimaterial de aluminio y polímero reforzado con fibra de carbono (CFRP) se produce en la misma planta que el del modelo de calle, en Böllinger Höfe, Neckarsulm (Alemania). La ligereza del modelo es también excelente: el coche solo pesa 1.235 kilogramos, aunque en las 24 Horas de Nürburgring esta cifra se redujo por reglamento hasta los 1.310 kg.

El motor V10 está casi complemente basado en el que equipa el modelo de serie. Con intervalos de revisión cada 10.000 km y de reconstrucción cada 20.000, el coche de carreras se convierte en una opción particularmente asequible para los equipos cliente. En el caso de Nürburgring, el motor ya había completado 5.000 km antes de que comenzase la actividad. La calificación del R8 LMS por parte de la organización, que sirve para poner a todos los competidores a un nivel de tiempo por vuelta similar, supuso una variación en las prestaciones del modelo. De esta forma, en el banco de motores (dinamómetro), el V10 producía solo 487 CV de potencia para la carrera de Nürburgring, debido a la brida de admisión obligatoria, un 27% menos que el motor de producción que alcanza los 620 CV. Por ello, en la clasificación de motores dentro de la clase SP9, el Audi R8 LMS se situaba en el penúltimo puesto. En otras palabras: el coche de carreras GT3 era el segundo coche menos potente de la parrilla debido a las restricciones del reglamento. Pero ganó la carrera gracias a lo equilibrado del conjunto.

El Nordschleife, el trazado largo de Nürburgring donde se disputan las 24 Horas, es una montaña rusa de 25,378 kilómetros muy respetada por los pilotos de todo el mundo: sigue manteniendo su carácter de “Infierno Verde”. A pesar de las difíciles condiciones de la pista, Audi –a diferencia de otros fabricantes– solo hizo pequeñas modificaciones en su coche para adaptarlo al circuito. La distancia al suelo de 70 mm según la normativa significaba que el GT3 se encontraba un centímetro más alto en el asfalto que en otros circuitos. También debido a la limitación que imponía un alerón trasero 100 mm más delgado, la carga aerodinámica se vio reducida. A pesar de ello, el deportivo mantuvo su facilidad de conducción y, tanto los ingenieros de pista, los pilotos y el equipo al completo realizaron una fantástica actuación durante todo el fin de semana.

Otros equipos cliente de Audi también tuvieron un gran éxito en esta icónica carrera de 24 horas. El Audi Sport Team Car Collection de los pilotos Marcel Fässler/Christopher Haase/René Rast/Marys Winkelhock acabó en la tercera posición de la clasificación general. El segundo Audi del equipo Phoenix Racing, con dos pilotos amateur (Klim-Luis Schramm y Vincent Kolb), consiguió una reseñable séptima posición junto con otros dos pilotos, gracias a la manejabilidad del coche. Cuatro pilotos gentleman del equipo Team Car Collection Motorsport, que compiten solo ocasionalmente, acabaron en la decimoquinta posición de una lista de 155 participantes, demostrando las cualidades del Audi R8 LMS. Igual que todos los clientes, se beneficiaron de la evolución más reciente del vehículo: desde 2019, un nuevo paquete aerodinámico ha mejorado aún más la conducción. Además, se han hecho modificaciones para incrementar la durabilidad y consistencia del vehículo.

¿Y qué pasará ahora con el coche de los ganadores? Audi Sport demuestra su cercanía con sus clientes y patrocinadores en este sentido. Audi venderá el coche ganador original a un partner interesado, tal y como hicieron tras conseguir la victoria hace dos años.

Con su segunda victoria en una carrera de 24 horas en solo seis meses, tras vencer en su debut en Dubái el pasado mes de enero, y después de lograr su decimotercera victoria absoluta en una prueba de 24 horas, el Audi R8 LMS está considerado como uno de los mejores modelos en todo el mundo. Más de una docena de fabricantes ofrecen coches GT3 para equipos. Otra importante carrera está ahora a la vuelta de la esquina: apenas cinco semanas después de que se disputase  Nürburgring, el último fin de semana de julio tendrán lugar las 24 Horas de Spa, un evento con mucha historia en Las Ardenas, donde Audi ha ganado en cuatro ocasiones desde 2011.

 

Así ganó el R8 LMS las 24 Horas de Nurburgring