jueves. 28.03.2024

Hace exactamente 85 años, el 22 de octubre de 1934, Skoda reveló la denominación Superb. La marca introdujo el nombre para resaltar la calidad y la comodidad de sus berlinas de lujo, que hasta la fecha siempre se habían lanzado con la designación S 640. La primera generación del Superb se produjo hasta 1949. En 2001, el fabricante checo resucitó la tradición, lanzando la primera generación moderna del Superb. Con las carrocerías Superb y Combi, la tercera generación de la gama está siendo un éxito.

Los primeros vehículos de lujo salieron de los edificios de la fábrica de Laurin & Klement en Mladá Boleslav hace más de 110 años. En 1907, el FF lucía el primer motor de ocho cilindros en línea fabricado en Europa Central. Le siguieron otros modelos con los motores especialmente suaves sin válvulas Knight de seis cilindros y el prestigioso Skoda 860, que montaba un motor de ocho cilindros y se fabricó entre 1929 y 1933. El 640 de nueva generación tomó el relevo. Este modelo disponía de un bastidor tubular central especialmente innovador y suspensión independiente, y fue el primero en llevar la denominación que hoy caracteriza a los modelos tope de gama de Skoda.

El nombre " Superb " viene del inglés, y se deriva, en última instancia, del latín "superbus", que significa "orgulloso" o "magnífico". Skoda introdujo el nombre del Superb el 22 de octubre de 1934 para poner de relieve el carácter excepcional del nuevo Š 640. El primer modelo de esta berlina de 5,5 metros de largo, 1,7 metros de ancho y 1,66 metros de alto se presentó al entonces Consejero Delegado del Grupo Skoda, el Dr. Karel Loevenstein, en enero de 1935. Su mujer Pavla escogió el color de la carrocería, optando por el rojo.

La producción en serie del Superb empezó en marzo de 1935. El modelo de alta gama estaba propulsado por un motor de seis cilindros de 2,5 litros y 55 CV de potencia. Rápidamente, la alta demanda conllevó mayores tiempos de entrega: los clientes tenían que esperar cuatro semanas para las versiones con carrocería cerrada y el doble de tiempo para el Superb descapotable. Además de las especificaciones de serie, una radio de coche con seis tubos de electrones y estantes de palisandro detrás de los asientos delanteros también estaban disponibles por un coste adicional.

Casi cada año, la compañía fue sacando innovaciones adicionales, como motores más potentes y una gama de equipamientos más amplia. Tras fabricar cerca de 600 vehículos con control de válvulas SV, en 1938 Skoda introdujo el Superb OHV, con un motor de seis cilindros en línea de 80 CV y una cilindrada de 3.137 c.c. Poco antes de que se suspendiera la producción en 1940 debido a la guerra, se fabricó una pequeña serie del Superb 4000 con motores V8. En 1946, Skoda retomó la producción de una versión revisada con motores de seis cilindros, antes de dar por terminada la producción por motivos políticos en 1949, tras haber fabricado cerca de 1.000 unidades para el uso civil. También se produjeron 1.660 vehículos militares bajo la designación S 952 y S 956.

En 2001, el Superb protagonizó su regreso: la primera generación moderna de la gama amplió el porfolio de productos del fabricante checo para incluir una berlina de tamaño medio.

 

El Skoda Superb cumple 85 años