martes. 23.04.2024

Comienza la producción en serie del primer modelo híbrido de altas prestaciones de Mercedes-AMG, equipado con tecnología procedente de la Fórmula 1. Su concepto técnico incluye una configuración específica de propulsión híbrida con motor eléctrico y batería junto al eje trasero, así como una batería de altas prestaciones de desarrollo propio. Gracias al diseño específico de la cadena cinemática, el Mercedes-AMG GT 63 S E PERFORMANCE conjuga cotas superiores de potencia con un dinamismo de conducción impresionante y un nivel máximo de eficiencia. Con otras palabras, el modelo E PERFORMANCE traspasa el ADN de la AMG Driving Performance al futuro electrificado de la conducción. La operación en paralelo de un motor V8 biturbo de 4,0 litros con un motor eléctrico genera una potencia combinada de 620 kW (843 CV) y un par motor combinado máximo de más de 1.400 Nm. La respuesta inmediata de la propulsión eléctrica en el eje trasero, el aumento rápido del par y la distribución mejorada del peso entre los ejes son la clave de una experiencia de conducción nueva, con alto dinamismo. Al igual que sucede en los bólidos de Fórmula 1, la batería está dimensionada para una entrega rápida de la potencia y una recarga no menos ágil. La autonomía eléctrica de 12 kilómetros supone un radio de acción adecuado para la conducción diaria, por ejemplo, en ciudad o en zonas residenciales. Mercedes-AMG abre nuevas vías de comunicación sobre electrificación en cooperación con el embajador de la marca will.i.am. Este músico de fama mundial, premiado varias veces con el Grammy, es el protagonista de la campaña de marketing «Everything but quiet». El rapero no solo ha tomado parte en la creación del concepto, sino que ha escrito una canción exclusiva para el vídeo de presentación.

 

Diseño expresivo con llamativo faldón delantero

El expresivo diseño con capó prolongado hacia abajo, cuerpo de la carrocería musculoso, habitáculo bajo y poderosa zaga fastback revela los genes deportivos del coupé de cuatro puertas. Un elemento llamativo es el característico faldón delantero, que se orienta por la forma del AMG GT de dos puertas. Las formas y el acabado de este componente se integran armoniosamente en el dinámico diseño del vehículo completo. Las tomas de aire en los extremos del frontal son más anchas, y su contorno se estrecha en dirección al centro del vehículo. Tres perfiles verticales canalizan el caudal de aire hacia los radiadores instalados en los pasarruedas.

Dos atributos distintivos exclusivos en la zaga son el faldón trasero con tapa de la caja de enchufe integrada y el anagrama de modelo sobre fondo rojo. AMG introduce con este modelo híbrido embellecedores trapezoidales para los tubos de escape dobles, estriados en el exterior. La placa «E PERFORMANCE» sobre los guardabarros destaca en la vista lateral el concepto de propulsión híbrida del modelo. Al igual que sucede en los demás modelos de la serie, la versión híbrida puede personalizarse con numerosas pinturas y detalles de equipamiento. Por ejemplo, se dispone en total de cuatro pinturas mate, cinco tonos metalizados y dos colores estándar. A esto se añaden siete pinturas nuevas de la oferta ampliada de personalización. El diseño exterior puede acentuarse, entre otros equipos, con el nuevo paquete AMG Night II o con la combinación de paquete Night y paquete de fibra de carbono. También es posible elegir las nuevas llantas de aleación de 20 y de 21 pulgadas en dos variantes cromáticas. El híbrido de altas prestaciones estará disponible también en una versión Edition exclusiva.

Como le corresponde en calidad de nuevo buque insignia de la serie, el AMG GT 63 S E PERFORMANCE cuenta con un equipamiento especialmente amplio. Este modelo incorpora todas las mejoras de la última reestilización, como el tren de rodaje AMG RIDE CONTROL+ con nuevo sistema de amortiguación. El equipamiento de serie incluye también el sistema adaptado de frenos cerámicos AMG de alto rendimiento con discos compuestos, y el sistema multimedia MBUX con visualizaciones específicas para la propulsión híbrida.

 

Sistema multimedia MBUX con visualizaciones específicas para la propulsión híbrida

El puesto de conducción widescreen incorporado de serie dispone del sistema multimedia MBUX con visualizaciones y funciones específicas para la propulsión híbrida. El conductor puede consultar en el cuadro de instrumentos la autonomía eléctrica, el consumo eléctrico, la potencia y el par del motor eléctrico y la temperatura de la batería y del motor eléctrico. En gráficas de alta calidad se muestran en el visualizador de medios el flujo energético del sistema completo de propulsión, el número de revoluciones, la potencia, el par y la temperatura del motor eléctrico, así como la temperatura de la batería. Los ocupantes de las plazas traseras pueden consultar en un visualizador de medios opcional datos sobre el flujo energético y la potencia y el par del motor eléctrico.

 

Volante AMG Performance en diseño de radios dobles

Otro equipo que aporta un valor añadido sensible y visible es el volante AMG Performance incorporado de serie con su llamativo diseño de radios dobles y botones integrados sin solución de continuidad en la superficie. Los tres radios dobles de contorno redondeado combinan estabilidad con ligereza. Las teclas AMG redondas en el volante convencen con sus brillantes visualizadores integrados y su perfecto esquema lógico de manejo, girando y oprimiendo la tecla. Con estos mandos pueden controlarse funciones importantes del vehículo y todos los programas de conducción sin necesidad de retirar las manos del volante. Una novedad es la posibilidad de seleccionar los niveles de recuperación energética de la propulsión híbrida mediante las teclas en el volante.

En el AMG GT 63 S E PERFORMANCE se combina un motor V8 biturbo de 4,0 litros con un motor eléctrico síncrono de excitación permanente, una batería de altas prestaciones desarrollada en Affalterbach y la tracción integral completamente variable AMG Performance 4MATIC+. El tándem formado por el motor V8 biturbo de 4,0 litros y el motor eléctrico genera una potencia combinada de 620 kW (843 CV) y un par motor combinado máximo de más de 1.400 Nm. El resultado son prestaciones impresionantes del vehículo de serie más potente de la historia fabricado en Affalterbach. La aceleración de 0 a 100 km/h se completa en solo 2,9 segundos, y la cota de 200 km/h se alcanza en menos de diez segundos. Este descomunal impulso termina cuando el velocímetro señala 316 km/h.

El motor eléctrico de 150 kW (204 CV) se sitúa junto al eje trasero, en donde se combina con una transmisión de dos marchas con acoplamiento eléctrico y el diferencial autoblocante del eje trasero con regulación electrónica para configurar una unidad de propulsión eléctrica (Electric Drive Unit, EDU) de dimensiones compactas. Los especialistas denominan «P3-Hybrid» a un vehículo basado en esta configuración. La batería ligera de altas prestaciones está dispuesta asimismo en la zaga del vehículo, por encima del eje trasero. Este dimensionamiento compacto aporta numerosas ventajas:

 

Inspirada en la Fórmula 1, desarrollada en Affalterbach: la batería AMG High Performance

Una de las premisas asumidas durante la fase conceptual de la estrategia de electrificación era desarrollar en nuestras instalaciones de Affalterbach todos los componentes esenciales de la propulsión. Esto incluye la batería AMG High Performance (HPB), el núcleo de los futuros modelos. El desarrollo del acumulador de energía de iones de litio está inspirado por las tecnologías acreditadas bajo las condiciones más duras imaginables en los bólidos híbridos de Fórmula 1 de la escudería Mercedes-AMG Petronas F1. A lo largo del proceso de desarrollo tuvo lugar un intenso intercambio de conocimientos entre los expertos de la forja de motores de Fórmula 1 High Performance Powertrains (HPP) en Brixworth y de Mercedes-AMG en Affalterbach. La batería AMG High Performance combina una potencia elevada —que el conductor puede solicitar con frecuencia y de forma repetida durante la conducción— con un peso bajo, lo que contribuye a mejorar las prestaciones del vehículo. Esto significa lo siguiente: si se conduce con dinamismo por un terreno de topografía variable, el conductor puede reclamar con espontaneidad la potencia máxima del equipo de propulsión durante las subidas, mientras que la batería se recarga con rapidez en las bajadas.

 

70 kW de potencia en régimen continuo y 150 kW como valor punta

La batería de altas prestaciones que se monta en el AMG GT 63 S E PERFORMANCE tiene una capacidad de 6,1 kWh, una potencia en régimen continuo de 70 kW y una potencia máxima de 150 kW durante un periodo de diez segundos. El bajo peso, de solo 89 kilogramos, conduce a una densidad de potencia muy elevada de 1,7 kW/kg. A título comparativo, las baterías convencionales sin refrigeración directa de las células alcanzan aproximadamente la mitad de este valor. Para la carga se utiliza el cargador de 3,7 kW instalado en el vehículo, que se conecta a una estación de carga, a una Wallbox o a una caja de enchufe doméstica. La batería está dimensionada para un intercambio rápido de potencia —tanto entrega como recarga— y no para una autonomía especialmente amplia, como sucede en otros modelos. No obstante, es posible recorrer en régimen exclusivamente eléctrico hasta 12 kilómetros, un radio de acción práctico, por ejemplo, para el desplazamiento sin emisiones y con bajo nivel de ruido de la zona de residencia hasta las afueras de la ciudad, o hasta la autopista.

 

 

La potencia eléctrica está disponible en todo momento

La estrategia básica de operación se deriva de la utilizada en el conjunto de propulsión híbrida del bólido de Fórmula 1 Mercedes-AMG Petronas. Al igual que sucede en la categoría reina del deporte del motor, este sistema pone a disposición la potencia de propulsión máxima siempre que la necesite el conductor. Por ejemplo, al acelerar con brío a la salida de una curva, o al adelantar. Gracias a la alta potencia de recuperación y a la recarga de la batería en función de la demanda, es posible solicitar en todo momento la potencia eléctrica, y reproducir este proceso con frecuencia. El concepto específico de la batería permite lograr un compromiso ideal entre máximo dinamismo de conducción y la eficiencia que se espera hoy en día de un automóvil. Todos los componentes están perfectamente armonizados entre sí, lo que se refleja de forma inmediata en el aumento de las prestaciones.

Los siete programas de conducción de AMG DYNAMIC SELECT «Electric», «Comfort», «Sport», «Sport+», «RACE», «Calzada resbaladiza» e «Individual» están optimizados para las características de la nueva tecnología de propulsión y ofrecen por tanto una vivencia de conducción altamente variable, desde muy eficiente hasta muy dinámica. Los programas de conducción adaptan parámetros importantes del vehículo, como la respuesta del equipo de propulsión y el cambio, la curva característica de la dirección, la amortiguación del tren de rodaje y la sonoridad. Los programas pueden seleccionarse mediante el interruptor basculante en la consola central o mediante las teclas AMG en el volante.

Habitualmente, el modelo híbrido de altas prestaciones se activa sin ruido («Silent Mode») en el programa «Comfort» en el momento en que el conductor conecta el motor eléctrico. El cuadro de instrumentos muestra el icono «Ready», que indica que el vehículo está en orden de marcha. Al mismo tiempo, a modo de confirmación acústica de que el vehículo está preparado para iniciar la conducción, se emite un sonido Start-Up potente y sonoro, característico de AMG, que se reproduce en el habitáculo por medio de los altavoces del vehículo. A partir de ese momento, basta con pisar levemente el pedal acelerador para que el modelo híbrido AMG Performance se ponga en movimiento.

Si se circula en modo eléctrico exclusivo, el Acoustic Vehicle Altering System exigido por la legislación advierte al entorno de la aproximación del modelo híbrido de altas prestaciones. Se emite hacia el exterior una sonoridad compuesta especialmente para AMG, con tonos de baja frecuencia y modulada en función de la velocidad, utilizando para ello un altavoz en el frontal y otro en la zaga. Una parte del sonido se escucha también discretamente en el habitáculo, como confirmación acústica para los pasajeros. En la Unión Europea, el sistema está activo hasta una velocidad de 20 km/h; en los Estados Unidos, hasta unos 30 km/h. A continuación, la señal de circulación se atenúa armoniosamente hasta una velocidad aproximada de 50 km/h.

Si se circula más deprisa, el cliente puede utilizar las teclas de sonido en la consola central o en el volante (pueden reconocerse por el símbolo de ondas de frecuencia) para alternar entre dos vivencias sonoras, denominadas «balanced» y «powerful». Durante la conducción en modo eléctrico exclusivo se genera una vivencia acústica discreta o potente. Si arranca el motor de combustión interna, el ajuste seleccionado influye en el sonido del sistema de escape. Algo permanece invariado en todas las situaciones: la sonoridad del híbrido de altas prestaciones es inconfundible y permite identificar a un AMG en todas las condiciones de operación.

Otras ventajas de la propulsión híbrida resultan de la regulación del dinamismo. En lugar de una intervención en los frenos al activarse el ESP®, el motor eléctrico puede regular la tracción en el momento en que se advierte un resbalamiento excesivo en una rueda. Para ello, el sistema inteligente de mando reduce el par de propulsión del motor eléctrico, que se transmite a la rueda a través del diferencial autoblocante del eje trasero. Como consecuencia, el ESP® no tiene que intervenir, o puede hacerlo más tarde. Las ventajas son evidentes. El motor de combustión interna puede operar con un par motor mayor, lo que mejora tanto la agilidad una vez finalizada la situación comprometida como la eficiencia. Además, es posible utilizar la potencia —que sería «destruida» por intervención de los frenos— para recargar la batería.

 

Es posible seleccionar cuatro niveles para la recuperación

Dado que la batería de alto rendimiento trabaja siempre en el rango ideal de temperatura de unos 45 grados por acción de la refrigeración directa, es posible optimizar también la recuperación. Normalmente, una batería se calienta fuertemente si aumenta la potencia de recuperación, de modo que es preciso restringir la recuperación eléctrica.

La recuperación comienza en el momento en que el conductor levanta el pie del pedal acelerador, es decir, en régimen de retención sin pisar el pedal de freno. Durante esta fase se carga la batería y se genera un momento de frenado elevado, con lo que disminuye el desgaste de los frenos de servicio en las ruedas que, en función de la situación del tráfico y el nivel de recuperación, ni siquiera necesitan intervenir. El conductor puede accionar la tecla AMG en el lado derecho del volante para elegir entre diferentes potencias de recuperación. Esto se aplica en todos los programas de conducción, con excepción de «Calzada resbaladiza», si bien la recuperación puede variar según el programa de conducción activo.

  • Nivel 0: el vehículo se comporta como un modelo convencional con motor de combustión y cambio manual en el que el conductor pisa el embrague; es decir, continúa rodando con muy baja resistencia mecánica. La potencia de recuperación es muy reducida, y contribuye solamente a asegurar la alimentación eléctrica del vehículo. Si está apagado el motor de combustión interna se reducen al mínimo las pérdidas por fricción en la cadena cinemática.
  • Nivel 1: este ajuste es el estándar, en el que el conductor percibe la recuperación, correspondiente aproximadamente a la deceleración de un motor de combustión interna embragado.
  • Nivel 2: recuperación intensa; no es prácticamente necesario accionar el pedal de freno al desplazarse en el tráfico fluido.
  • Nivel 3: máximo nivel de recuperación energética. En este nivel es posible la conducción «One-Pedal», como en un vehículo exclusivamente eléctrico. En función de la situación de conducción, es posible devolver a la batería más de 100 kW de potencia.
  • Particularidad del programa de conducción RACE: en el modo de circuito de carreras, el conductor desea apurar al máximo el tiempo de frenada. En el programa de conducción «RACE» se fija automáticamente la recuperación al nivel 1 con el fin de permitir un comportamiento reproducible del vehículo en el margen límite.

Otra ventaja de la recuperación es que el vehículo no acelera durante el descenso de pendientes acusadas. Es decir, el sistema actúa como un freno motor, pero recupera al mismo tiempo energía y la envía a la batería.

 

Motor AMG V8 biturbo de 4,0 litros con turbocompresores de doble entrada

El nuevo modelo tope de gama de la serie, el AMG GT 63 S E PERFORMANCE, utiliza un motor AMG V8 biturbo de 4,0 litros con 470 kW (639 CV) y un par máximo de 900 Nm, disponible en una amplia gama de revoluciones, desde 2.500 hasta 4.500 rpm. Este dimensionamiento armoniza a la perfección con el motor eléctrico, que alcanza su par máximo de 320 Nm desde el primer giro de las ruedas.

 

Tren de rodaje AMG RIDE CONTROL+ de serie con amplia gama de ajuste, entre dinamismo y confort

El tren de rodaje AMG RIDE CONTROL+ se basa en una suspensión neumática multicámara con regulación automática del nivel, unida a una amortiguación regulable adaptativa con regulación electrónica. Este sistema de amortiguación es una novedad absoluta en los modelos AMG GT Coupé de 4 puertas. Es la primera vez que se utilizan dos válvulas limitadoras de presión. Estas dos válvulas de regulación con acción progresiva están situadas fuera del amortiguador y permiten adaptar la fuerza amortiguadora con mayor precisión que hasta ahora a las distintas condiciones de conducción y a los programas de conducción disponibles. Una válvula regula la fase de extensión, esto es, la fuerza resultante al extenderse la amortiguación de la rueda, y otra válvula regula la fase de compresión, cuando el conjunto amortiguador de la rueda se comprime. La regulación de la fase de extensión y de la fase de compresión tiene lugar de forma independiente.

Los ingenieros de desarrollo de AMG han aumentado de forma significativa el margen disponible entre el ajuste deportivo y el confortable. Para ello, entre otras medidas, han ampliado la separación entre las líneas características de la fuerza de amortiguación máxima y mínima, y han incrementado la flexibilidad en la definición del diagrama característico. Debido a la forma constructiva especial de las válvulas, el amortiguador reacciona con rapidez y sensibilidad a las variaciones en la superficie de la calzada y a cada situación de conducción.

El conductor puede preseleccionar el reglaje básico eligiendo uno de los programas de conducción AMG DYNAMIC SELECT. Basta con pulsar un botón para variar el comportamiento del vehículo. Por ejemplo, para disfrutar del pleno dinamismo en el modo «Sport+» o para moverse serenamente a velocidad de crucero en el modo «Comfort». Al mismo tiempo, es posible accionar un pulsador específico para variar el reglaje en tres niveles con independencia de los programas de conducción.

Los modelos híbridos de altas prestaciones de AMG incorporan la regulación integrada del dinamismo AMG DYNAMICS. Este equipo influye en las estrategias de regulación del ESP® (programa electrónico de estabilidad), de la tracción integral y del diferencial autoblocante del eje trasero con regulación electrónica. Con ello se incrementa una vez más la agilidad, manteniéndose al mismo tiempo la máxima estabilidad.

Un detalle especialmente notable es la capacidad de AMG DYNAMICS de determinar las reacciones del vehículo. El sistema utiliza para ello los sensores existentes, que miden, entre otros valores, la velocidad, la aceleración transversal, el ángulo de orientación de las ruedas y la velocidad de guiñada. Con ayuda de un control piloto inteligente es posible predecir el comportamiento del vehículo deseado por el conductor a partir de las acciones de este y de los datos de los sensores. La regulación se adapta a medida a las aptitudes de conducción dinámica del conductor sin intervenciones perceptibles del sistema. El conductor percibe una sensación de conducción especialmente auténtica, con elevado dinamismo en curvas y una tracción ideal, unida a alta estabilidad y un comportamiento de marcha previsible. Esto permite prestar una asistencia ideal —incluso a pilotos experimentados— sin que el conductor se sienta excesivamente tutelado por el sistema.

En el programa de conducción «Individual», el conductor puede definir personalmente los niveles de AMG DYNAMICS «Basic», «Advanced», «Pro» y «Master».

 

Sistema de frenos cerámicos de alto rendimiento AMG con discos compuestos

En el dimensionamiento del equipo de frenos no se admiten soluciones de compromiso. De acuerdo con los valores extremos de potencia y las prestaciones resultantes, se monta de serie el sistema de frenos cerámicos de alto rendimiento AMG con discos compuestos y pinzas fijas con 6 émbolos de color bronce delante, y pinzas de garra de 1 émbolo detrás. Este sistema está adaptado al elevado dinamismo del vehículo, y presenta dimensiones mayores que en los modelos equipados solamente con un motor de combustión interna. Los discos de freno de cerámica y fibra de carbono en el eje delantero miden 420 x 40 milímetros, los del eje trasero 380 x 32 milímetros. El sistema de frenos convence por distancias de frenado muy cortas, unidas a máxima resistencia y estabilidad al fading bajo esfuerzos elevados. Al mismo tiempo, destaca por su gran durabilidad y por su respuesta especialmente espontánea. Por otro lado, el uso de un material ligero ayuda a ahorrar peso y a reducir las masas no suspendidas. Entre las funciones de confort se cuentan la ayuda al arranque en pendientes, el llenado anticipado y la función frenos secos al conducir bajo la lluvia. Si está desconectado el encendido y el vehículo está detenido, el cambio activa automáticamente la posición de aparcamiento «P». El freno de estacionamiento eléctrico se suelta automáticamente al ponerse en marcha.

 

Estreno mundial del primer híbrido de altas prestaciones de Mercedes-AMG