Así es el arma de Carlos Sainz y Lucas Cruz para el Dakar 2021
Carlos Sainz y Lucas Cruz pelearán por su cuarta victoria juntos en el Dakar 2021 con Mini. El dúo español vuelve a ponerse a los mandos del JCW Buggy preparado por X-Raid en el rallye más duro del mundo, cuya 43ª edición comienza el próximo día 2 de enero con la etapa prólogo de Yeda (Arabia Saudí).
Desde su debut en 2018, el Mini JCW Buggy ha logrado un total de 11 victorias de etapa, casi un tercio del total en las que ha participado (35). En su palmarés reluce el título en el Dakar, el de 2020, logrado por Sainz y Cruz. Stéphane Peterhansel y Paulo Fiúza, terceros, pusieron la guinda a una edición histórica para la marca, que a lo largo de su historia ha logrado la victoria en cinco ediciones del rallye.
Por tercer año consecutivo, Sainz se pondrá al volante del Mini JCW Buggy, un prototipo de dos ruedas motrices que fue introducido en 2018 y que ha ido evolucionando año a año. El competitivo coche de carreras de la marca británica está diseñado y preparado por X-Raid, el socio de Mini en el Rallye Dakar.
A pesar de la crisis de la COVID 19 y de las limitadas oportunidades para realizar pruebas como resultado de la pandemia, los ingenieros de X-Raid han conseguido hacer cambios importantes en el Buggy. Entre otras cosas, esto ha permitido que los ingenieros analicen y optimicen muchos componentes, con el objetivo de reducir el peso. También ha sido posible optimizar la geometría de la suspensión y los reglajes. Y se ha mejorado la fiabilidad de aquellos componentes que mostraron más síntomas de fatiga en la pasada edición.
En el interior del Mini JCW Buggy ruge un motor de demostrada fiabilidad, basado en el bloque 50d utilizado en vehículos de calle del Grupo BMW. Este motor turbo de seis cilindros en línea desarrolla 350 CV de potencia a 3.500 rpm y un par motor de 770 Nm. A este propulsor se acopla una caja de cambios X-trac secuencial de seis velocidades, con diferencial integrado, que ha sido diseñada específicamente para este vehículo. Además de robusta, esta caja está diseñada para sus revisiones y operaciones de montaje y desmontaje tras las duras etapas sean lo más sencillas posible.
El aspecto exterior del Mini JCW Buggy delata que está diseñado para afrontar jornadas maratonianas de más de 500 kilómetros, plagadas de dunas, zonas rocosas o pistas rápidas. Por ello, equipa suspensiones específicas de gran recorrido para una prueba de altos vuelos como esta, así como neumáticos desarrollados especialmente para la carrera y un sistema de inflado y desinflado para poder superar las dunas de la mejor forma posible.
El mejor coche de los dos últimos años
“Estoy listo para el Dakar, tanto mental como físicamente, y el Mini JCW Buggy también está funcionando muy bien. Será mi tercer Dakar con Mini, y hemos mejorado año a año. El primero fue de puesta a punto, con algunos problemas. El año pasado fue excelente y para la edición de este año, aunque ha habido poco tiempo de preparación, el coche va a llegar mejor. Sin duda, es mejor que el de los dos últimos años”, ha declarado Carlos Sainz. “Por supuesto que es posible volver a ganar, pero en el Dakar nadie te regala nada. Más o menos tenemos los deberes hechos, y siento que tenemos la velocidad suficiente para luchar por la victoria”. “Es un coche cada vez más rápido, sólido y fiable gracias al metódico trabajo realizado”, asegura Lucas Cruz.
La preparación para el Dakar 2021
Los pilotos, por su parte, han continuado participando en carreras y entrenándose para el duro reto que siempre supone el Dakar. Entre ellas han estado el Rally de Andalucía, celebrado en octubre y donde Carlos Sainz y Lucas Cruz acabaron segundos, mientras que sus compañeros Stéphane Peterhansel y Edouard Boulanger finalizaron en cuarta posición.
En diciembre, las dos tripulaciones del equipo Mini han corrido dos Bajas en Ha’il (Arabia Saudí) como entrenamiento para el Dakar. En la primera, Sainz y Cruz acabaron en la segunda posición, justo por delante de Peterhansel/Boulanger. En la segunda, Carlos y Lucas subieron a lo más alto del podio, con Peterhansel y Boulanger de nuevo en el tercer puesto. Más allá de estos buenos resultados, lo verdaderamente importante de las pruebas es que las dos tripulaciones pudieron probar ajustes en el coche, el funcionamiento de las mejoras realizadas y entrenar en un año en el que los test y las competiciones han estado muy limitadas.
“Las dos Bajas en Arabia Saudí nos han permitido probar cosas que durante el año no habíamos podido hacer. Nos ha permitido probar y coger el ritmo de carrera, ante los mismos rivales que nos vamos a encontrar en el Dakar”, declara Lucas Cruz,
Sainz y Cruz pelearán por la que sería su cuarto Dakar tras los logrados en 2010, 2018 y 2020, mientras que sus compañeros Peterhansel y Boulanger, por el decimocuarto de su carrera. MINI, por otro lado, luchará por el sexto de su periplo en el rally más duro del mundo. Los más de 7.000 kilómetros de recorrido y las duras dificultades que tendrán que superar pilotos, equipos y coches, serán quienes decidan el vencedor de la 43ª edición de esta dura carrera.