Chapuzas a domicilio

Cuando el año pasado unos primos de Pepe Gotera y Otilio asfaltaron el circuito de Istambul Park no creíamos que las consecuencias negativas de esa pista podrían extenderse hasta esta temporada. Ante el desastre de los parientes de Ibáñez, la FIA ordenó este año una limpieza con agua a presión de toda la superficie asfaltada del trazado, similar a la que habitualmente hacen en circuitos urbanos como el de Singapur, y esta eliminó la brea o betún de la capa superior del mismo, no se pudo eliminar sin embargo el que había en su interior, entre las piedras que forman el aglomerado. ¿Resultado?, que ayer una pista que debería de haberse secado en 15 o 20 vueltas, al menos en la trazada de los pilotos, nos brindó una carrera entera sobre mojado que se une a los diferentes esperpentos que estamos viviendo esta temporada, donde no siempre gana el más rápido.

Tal y como Carlos Sainz definió en Movistar, ayer no llovía en Istambul Park, tan solo había “orbayu”. Pero, al hilo de lo que explicamos antes, la imposibilidad de filtrar el agua en el asfalto por estar este macizado de brea, evitó que este se secara, con lo que nos encontramos con una carrera donde los intermedios reinaron a placer. Y con ello el debate de si había que estirarlos hasta el final como hizo Esteban Ocon para arrancar el último punto de la clasificación, o si había que entrar a renovar las gomas por otras intermedias como hizo el resto.

Ahí estuvo el show que ofrecieron Mercedes y Lewis Hamilton, y es que, mientras en el muro Peter Bonnington se afanaba por convencer a su pupilo de entrar al box a cambiar los neumáticos, este se empeñaba en convencerlo que podían llegar hasta el final y alcanzar la tercera plaza del podio. La discusión duró 8 vueltas, hasta que en la 50 el británico encaró el fast lane. De no haberse hecho el cambio no sabemos si las ruedas de Hamilton hubieran aguantado, y si el ritmo habría sido suficiente para mejorar la quinta plaza que alcanzó al final, pero sin duda la reunión con los ingenieros en Mercedes tras la carrera tuvo que ser entretenida.

Con todo esto, Turquía ha sido una carrera donde los segundos espadas brillaron por todo lo alto. La victoria de Valtteri Bottas y la enconada defensa que Sergio Pérez hizo ante el heptacampeón mundial han justificado sus sueldos. Mientras que entre los españoles, Fernando Alonso perdió en la primera vuelta cualquier opción a transformar la buena jornada del sábado en puntos, primero en el toque con Pierre Gasly y luego con Michael Schumacher. La FIA castigó al francés en el primero y al asturiano en el segundo, pero sinceramente, tras visionarlos varias veces creo que ambos fueron más incidentes de carrera sin culpable claro.

Mientras que, en el otro lado de la representación hispana, Carlos Sainz firmó una de sus mejores carreras este año con una remontada que lo llevó desde el final de la parrilla hasta la octava plaza, y que de no haber tenido el problema en el pit stop, aún podría haber finalizado más arriba. Por el momento el madrileño continúa dando dolores de cabeza a un Charles Leclerc que ayer se quedó a las puertas de subirse al podio. Esta claro que los equipos deben pulir aún el procedimiento de pit stop desde que la FIA ha intervenido el proceso de asegurar que cada mecánico ha terminado con su labor.

Por cierto, aunque hace unas semanas cerramos el juego de la silla en el paddock, parece que en Sauber no están por la labor de adjudicar el último asiento libre de la parrilla para 2022. Lo que sin duda era un desembarco claro de los chinos en la estructura suiza que dirige Fred Vasseur, podría suponer ahora la entrada de los americanos de Andretti Autosport en la fórmula 1.

Lo que ahora conocemos como Alfa Romero, no es más que la estructura suiza de Sauber que cambió su nombre comercial por el de su patrocinador italiano en 2018. Dos años antes, Peter Sauber había vendido sus acciones en la compañía al fondo de inversión sueco Longbow Finance, principal valedor de Marcus Ericsson, y que ha dirigido la compañía desde entonces a través de su filial Islero Investments. Ahora, la familia Andretti con el equipo Andretti Autosport como matriz, y su filial Andretti Acquisition Corporation como división encargada de formar un equipo en la fórmula 1 deshojan la margarita para hacerse con el accionariado de los suecos.

Michael Andretti, hijo de Mario, campeón del mundo de fórmula 1 en 1978, es quien dirige la ofensiva, mientras que su apoyo económico para la cara operación a la que se enfrenta proviene del patrocinador que pinta el coche de Colton Herta en la fórmula Indy, la aseguradora Group One Thousand One, vinculada a la formación de Andretti a través de su filial Gainbridge. De hecho, el piloto elegido para el salto a la categoría reina sería el americano Herta, aunque por el momento sus tres victorias este año en la categoría que se ha llevado Alex Palou no le darían los puntos necesarios para obtener la súper licencia de la FIA, algo cuanto menos curioso.

Así que, mientras que en el despacho del CEO de Sauber en Hinwil Vasseur se debate entre la terna de tres de los pilotos más prometedores de la F2, el chino Guanyu Zhou (22 años) y la riestra de millones que trae consigo, el australiano Oscar Piastri (20 años) y el francés Théo Pourchaire (18 años) que se ha convertido en el piloto más joven en ganar carreras en la F2 y en la F3, un piso más arriba, los accionistas del equipo debaten si deben vender la organización a los americanos de Andretti, con lo que el asiento iría a parar a Herta. Vamos, a seis carreras de acabar el mundial el asiento de Antonio Giovinazzi es, sin duda, el más caliente de la parrilla. El italiano debería dedicarse más a actualizar su perfil en Linkedin que a preparar las carreras que restan de la temporada, aunque su presencia en Ferrari de cara a ser reserva y futuro piloto en su aventura en la resistencia parece más que probable.

Y con todo este jaleo en marcha en la estructura suiza, la próxima carrera se disputa en el circuito de las Américas, un buen sitio para sentarse con la gente de Andretti. Veremos si allí hay acuerdo y si los inversores de Zhou se quedan fuera por haber exigido tres años de contrato para el joven piloto chino.

@luismanuelreyes

CLASIFICACION
1.-Valtteri Bottas (Mercedes) 58 - 1:31'04.103
2.-Max Verstappen (Red Bull/Honda) 58 - 1:31'18.687
3.-Sergio Pérez (Red Bull/Honda) 58 - 1:31'37.574
4.-Charles Leclerc (Ferrari) 58 - 1:31'41.917
5.-Lewis Hamilton (Mercedes) 58 - 1:31'45.915
6.-Pierre Gasly (AlphaTauri/Honda) 58 - 1:31'48.395
7.-Lando Norris (McLaren/Mercedes) 58 - 1:31'51.316
8.-Carlos Sainz (Ferrari) 58 - 1:31'55.629
9.-Lance Stroll (Aston Martin/Mercedes) 58 - 1:32'26.121
10.-Esteban Ocon (Alpine/Renault) 57 - 1:31'14.837 - 1 vuelta
11.-Antonio Giovinazzi (Alfa Romeo/Ferrari) 57 - 1:31'15.592 - 1 vuelta
12.-Kimi Räikkönen (Alfa Romeo/Ferrari) 57 - 1:31'20.625 - 1 vuelta
13.-Daniel Ricciardo (McLaren/Mercedes) 57 - 1:31'23.174 - 1 vuelta
14.-Yuki Tsunoda (AlphaTauri/Honda) 57 - 1:31'28.529 - 1 vuelta
15.-George Russell (Williams/Mercedes) 57 - 1:31'32.219 - 1 vuelta
16.-Fernando Alonso (Alpine/Renault) 57 - 1:31'34.608 - 1 vuelta
17.-Nicholas Latifi (Williams/Mercedes) 57 - 1:31'40.119 - 1 vuelta
18.-Sebastian Vettel (Aston Martin/Mercedes) 57 - 1:31'59.986 - 1 vuelta
19.-Mick Schumacher (Haas/Ferrari) 56 - 1:31'23.389 - 2 vueltas
20.-Nikita Mazepin (Haas/Ferrari) 56 - 1:31'47.531 - 2 vueltas