Cupra: “Extreme E encaja en nuestra filosofía”
Xavi Serra, responsable de desarrollo técnico de Cupra Racing, descubre el nuevo campeonato Extreme E, en el que la marca participará en 2021 con el equipo ABT Cupra XE.
Xavi Serra, responsable de desarrollo técnico de Cupra Racing, descubre el nuevo campeonato Extreme E, en el que la marca participará en 2021 con el equipo ABT Cupra XE. La marca ha desarrollado en los últimos años el Cupra e-Racer, el primer turismo de competición 100% eléctrico, y aplicará esa experiencia para luchar por la victoria en este nuevo desafío.
¿Qué ha atraído a Cupra a este campeonato?
La competición forma parte del ADN de Cupra. Queremos estar en la primera línea de transformación del motorsport, y Extreme E encaja perfectamente con nuestra filosofía. Lo hace especialmente por los valores que promueve, como la sostenibilidad y el desarrollo sostenible; la igualdad de género, que nos parece una fórmula fantástica; y la electrificación. En Cupra no hemos dejado de lado los motores de combustión, pero también queremos ser pioneros a la hora de descubrir esta nueva tecnología, como ya hemos demostrado en los últimos años con el desarrollo del Cupra e-Racer.
¿Cuál es tu papel en el equipo?
Yo daré apoyo a los ingenieros de ABT, que es nuestro socio en este proyecto y quien se encargará de la gestión del equipo en pista. Por mi parte y por la de Cupra Racing, utilizaremos la experiencia que hemos acumulado en los dos últimos años en el desarrollo del Cupra e-Racer para sacar el máximo potencial del e- Cupra ABT XE1, porque al final la base y la tecnología es la misma. He estado en los test privados que hicimos en Alemania y en los de Aragón, y el sabor de boca que me queda es muy bueno: tenemos un gran equipo, aunque ganar no va a ser fácil dada la enorme igualdad que existe entre escuderías.
¿Cuál ha sido el plan de trabajo en los test?
Es la primera vez que rodamos con un coche que no hemos diseñado nosotros, por lo que hemos tenido que descubrirlo todo. Hemos tenido que conocer el sistema de propulsión, cómo entrega la potencia el coche, el funcionamiento de la batería… En la primera prueba nos centramos en recoger experiencias y sensaciones por parte de los pilotos, buscar distintas superficies, hacer pequeños cambios y ver cómo se sentían los pilotos… e ir mejorando y conociendo el coche poco a poco.
¿Qué va a marcar la diferencia?
Solo podemos hacer pequeños cambios en el coche; a cada detalle le tenemos que sacar el mayor potencial posible. Los pilotos van a ser fundamentales para conseguir los mejores resultados; la influencia del set-up va a ser menor y su adaptación al coche y al terreno van a marcar la diferencia. Hay que ser rápido desde el minuto uno, porque apenas va a haber tiempo para entrenar. En otros campeonatos hay entrenamientos libres, te paras a mirar los datos con el piloto para ver dónde puede ir mejor… pero aquí no. Es, prácticamente, llegar, subirse al coche y correr. El formato de competición todavía se está cerrando, tenemos que esperar para conocerlo, pero por el momento ya conocemos algunos detalles y prevemos que haya mucha acción. Por ejemplo, sabemos que habrá una serie de “batallas”, con salida en línea de cuatro en cuatro coches, y que en base a los resultados se irán conformando las mangas sucesivas. La rápida adaptación va a ser crucial.
Yo no tengo dudas de que estamos en buenas manos, porque Mattias (Ekström) es uno de los pilotos más polivalentes del mundo, capaz de ganar un Campeonato del Mundo de Rallycross yendo de lado por todo tipo de superficies y de ganar dos títulos del DTM con coches de gran downforce y, por tanto, altísimo agarre. Claudia (Hürtgen), por otro lado, también tiene mucha experiencia y una gran capacidad de adaptación.
¿Cuál consideras que debe ser la evolución del Extreme E en el futuro?
Creo que ahora es importante afianzar la categoría y el concepto. Si empezamos a liberar la tecnología demasiado pronto, puede ser contraproducente, porque incrementaría los costes. En Cupra queremos experimentar con tecnología que en el futuro podamos llevar a nuestros coches de calle, queremos llevar al límite los componentes, la gestión de la energía, del par motor, la gestión térmica… y eso solo lo podemos hacer en la competición. Con el e-Racer hemos experimentado y aprendido mucho durante los últimos años, y esa es una experiencia que podremos aplicar tanto para sacar el mayor rendimiento posible al Extreme E como para hacer mejores nuestros coches de calle.