Elfyn Evans el persistente
La perseverancia de Elfyn Evans (Yaris WRC), le ha llevado a conseguir su cuarta victoria en el WRC, después de estar acariciándola durante muchos rallyes, lo que por otra parte le catapulta junto a Ogier, en la lucha por un liderato que, por el momento, es cosa de ambos.
La perseverancia de Elfyn Evans (Yaris WRC), le ha llevado a conseguir su cuarta victoria en el WRC, después de estar acariciándola durante muchos rallyes, lo que por otra parte le catapulta junto a Ogier, en la lucha por un liderato que, por el momento, es cosa de ambos. Magnífica también la carrera de Dani Sordo (i20 WRC) mientras, el resto de españoles, cumplieron la cita lusa con más sombras que luces.
RALLYE…
Con base en Exponor, a las afueras de Oporto, la prueba ha resultado un éxito rotundo por la auténtica novedad de permitirlo totalmente abierto al público, a excepción de lugares puntuales como el parque de trabajo, ceremonias de salida y llegada, circuito de Baltar o la Súper Especial de Oporto, que fueron vetadas a los aficionados, para evitar masificaciones.
Por lo que se refiere a tramos, pocos cambios, con una etapa en los alrededores de Coimbra y las otras por la zona norte.
PRIMERA ETAPA…
Desde los primeros compases Dani Sordo dejó claro que iba a por el rallye y favorecido por su posición de salida, no dejo títere con cabeza, hasta que un pinchazo en Mortagua, penúltima especial del día, le arrebató la primera plaza y buena parte de sus opciones de ganar una carrera que, hasta entonces, era dominada a placer por los Hyundai.
Poco duraría la alegría ya que al pinchazo de Sordo, había que unir una salida de carretera de Neuville (i20 WRC) que arrancaba una rueda y permitía a los Toyota meterse en la pelea, a pesar de que Sebastien Ogier (Yaris WRC) no hacía un crono decente, Evans se mantenía al acecho y Kalle Rovanpera, con otro de los Toyota oficiales, no tenía su rallye, mientras en Ford, se peleaban entre ellos.
SEGUNDA ETAPA…
El segundo día de carrera era el más largo, con una especial de 38 kilómetros como Amarante que, a la postre decidió las posiciones ya que, el hasta entonces líder Ott Tanak, se salía de la carretera y Evans pasaba a dominar la prueba, con Sordo al acecho y Ogier que se metía en el pódium, aunque a mucha distancia de los dos primeros, mientras Rovanpera abandonaba definitivamente y Neuville se iba del rallye, para optar a la Power Stage.
TERCERA ETAPA…
Como era de esperar, la última etapa presenta como mayor aliciente el reparto de los puntos de la Power ya que, como era previsible, Dani Sordo no se la jugó contra Evans y Ogier dió por muy buena la tercera posición, así que Neuville y Tanak se adjudicaban los dos primeros puestos, Elfyn Evans por tanto ganaba el rallye y Sordo se quedaba como único representante de Hyundai en el segundo peldaño del podio siendo completado por Ogier.
LA SOMBRA ESPAÑOLA…
Aparte de Dani Sordo había mas representación española y si bien en la Peugeot Rally Cup Ibérica se dejaba el pabellón muy alto con triplete hispano, con Alejandro Cachón, Alberto Monarri y Muñiz, y en WRC3, tanto Pepe López como Jan Solans, tenían que abandonar por sendos vuelcos, a las primeras de cambio. Si que finalizaban en sus labores de copilotaje Carlos del Barrio acompañando a Fabrizio Zaldibar (Fabia Evo) y, Marc Martí haciendo lo propio con el chileno Alberto Heller (C3)
Esapekka Lappi (VW Polo GTI) ganaba en WRC2 y Kajetan Kajetanowicz (Fabia Evo) en WRC3 mientras en el campeonato luso, sería Armindo Araujo (Fabia Evo) el vencedor.
Texto y fotos: Luis Eiriz