Segunda participación mundialista del 2023 para el piloto español, la primera del año sobre tierra, superficie en la que ha cosechado tres podios hasta la fecha desde su estreno a mediados de la pasada temporada con el Hyundai i20 N Rally1 desarrollado por Hyundai Motorsport.
El WRC está de vuelta en el continente americano. Tras un largo paréntesis de tres años, desde que el confinamiento derivado de la pandemia del COVID obligó a cancelar la última etapa, el certamen mundialista retorna por fin al Rallye de México, uno de los escenarios donde más ha disfrutado compitiendo desde sus inicios Dani Sordo.
El piloto español de Hyundai Motorsport retoma esta semana su programa al volante del Hyundai i20 N Rally1, el vehículo híbrido de última generación introducido el pasado año por la escuadra de Alzenau. Se trata de la segunda participación que efectúa el cántabro esta temporada en el WRC, la primera de ellas sobre tierra, superficie en la que encadenó tres podios consecutivos a lo largo del 2023, desde que estrenó conjuntamente con Cándido Carrera el nuevo modelo introducido por el fabricante coreano.
A esa racha de resultados se suma además el elevado nivel de competitividad que suele alcanzar el piloto de Puente San Miguel sobre los sinuosos caminos de montaña, ubicados todos ellos a gran altitud, donde se celebra el Rally de México. Es por eso que Dani Sordo parte con grandes expectativas a la prueba azteca, en la que espera poder aprovechar su posición de salida el primer día para incorporarse desde el principio a la pugna por los puestos de referencia.
Los ensayos previos a la cita latinoamericana, efectuados en Portugal, han resultado muy positivos para el piloto español de Hyundai Motorsport y su copiloto, Cándido Carrera, que afronta a partir del viernes su primer Rallye de México. Una prueba muy colorida, donde se respira un ambiente sensacional, en la que Dani Sordo cuenta con multitud de seguidores que le hacen sentir cada año como si corriera en casa.
Dani Sordo declaraba: “El Rallye de México es increíble, con unos tramos preciosos. Además, los aficionados le ponen mucha pasión y energía a la prueba, lo que hace que el ambiente sea muy especial. Pasamos por tramos que tienen bastante altitud, en los que la potencia del motor disminuye, por lo que sientes el coche un poco diferente. Físicamente es muy exigente, tienes que estar preparado para la falta de oxígeno y el calor, todo eso hace que te sientas más cansado. Mi objetivo este año es acabar lo más arriba posible, espero que en los puestos de cabeza. Si lo hacemos bien, creo que podremos estar peleando por la victoria, pero como mínimo quiero conseguir un podio".
