jueves. 07.11.2024

Óscar Fuertes iniciará el próximo 1 de enero su cuarto Rallye Dakar, el primero con el Astara Team, el nuevo equipo 100% español con el que él y su compañero, el aventurero Jesús Calleja, se marcan objetivos muy ambiciosos… y no solo deportivos.  El madrileño, que vuelve a correr con Diego Vallejo a su derecha, se ve con opciones de finalizar entre los quince primeros en el Dakar 2022 y, gracias al uso del e-fuel, la escudería se ha fijado como meta dejar la menor huella de carbono de la carrera.

Óscar, que durante el resto del año está centrado en su trabajo como director de la empresa de formación INFOVA Automoción, ha alcanzado la meta del Dakar en las tres ocasiones en las que ha participado, 2018, 2019 y 2020; este último año, además, finalizó en la tercera posición de su categoría.

Vuelves al Dakar con un nuevo proyecto, ¿qué destacas del Astara Team?

“Hemos formado un equipo muy competitivo con dos coches. En uno irán Jesús Calleja y Edu Blanco, y en otro Diego Vallejo y yo. Ambas parejas corremos con un buggy que hemos bautizado como 01 Concept, y que se basa en el rapidísimo y fiable Century CR6 que ha ganado etapas en el Dakar y también en otras carreras internacionales. Para la gestión deportiva contamos con el apoyo de SMC Motorsport, con quienes nos aseguramos un alto nivel de competitividad.

Una parte fundamental del proyecto y de nuestra estrategia es que el Astara Team utiliza un combustible sostenible (e-fuel), que nos permitirá reducir notablemente nuestro impacto en el medioambiente”.

¿Por qué habéis optado por e-fuel?

“Antes del Dakar valoramos distintas opciones para correr el Dakar de forma sostenible. Para nosotros era clave poder acceder al potencial total del coche, sin comprometerlo con unas baterías que pesaran mucho y almacenaran una cantidad limitada de energía, y además teníamos que hacerlo sin un presupuesto disparatado. Elegimos el e-fuel porque tiene una alta densidad energética, gracias a la que podemos recorrer los kilómetros de cada etapa y enlaces sin comprometer nuestra competitividad. Para nosotros, esta es, a día de hoy, la mejor solución posible para correr el Rally Dakar a un nivel competitivo.

Para que os hagáis una idea, el e-fuel es capaz de almacenar una enorme cantidad de energía en un tamaño y peso muy reducidos: un litro de e-fuel contiene 10,752 kWh. Solo 9,3 litros de este combustible almacenan la misma cantidad de energía que una batería de 100 kWh, que es 55 veces más pesada. El rendimiento energético del e-fuel es un 12% superior al de la gasolina”.

¿Cómo se obtiene este combustible?

“La producción de e-fuel se basa en la obtención de gas de síntesis mediante el uso de energías renovables. Posteriormente, ese gas de síntesis se somete a una serie de procesos químicos de transformación, que tienen como resultado un hidrocarburo líquido sintético fácil de usar, almacenar y transportar. Su impacto ambiental es nulo, pues el CO2 que se emite a la atmósfera durante su combustión es el mismo que se ha extraído del aire durante su producción. No emite residuos sólidos ni micropartículas.

Nuestros 01 Concept han requerido unas pequeñas adaptaciones en el sistema de inyección y en la gestión electrónica para poder utilizar e-fuel, y ese es también el mensaje que queremos enviar: podríamos tener e-fuel en los coches de calle sin que los usuarios tuvieran que hacer un gran desembolso económico. Sería una gran forma de reducir las emisiones del parque automovilístico sin tener que cambiar de coche”.

En este Dakar habrá equipos con e-fuel, con biocombustible, e incluso con electrificación…

“Nosotros hemos entendido que esta es la mejor solución posible en términos de prestaciones y sostenibilidad. Y vamos mucho más allá, pues nos marcamos como objetivo dejar la menor huella de carbono en el Dakar. No es algo que decimos nosotros “porque sí”, sino que nos vamos a someter a examen con una auditora externa que se encargará de medir nuestra huella de carbono. Al acabar el Dakar lo analizaremos y compensaremos las emisiones restantes con un proyecto positivo para el medioambiente para así alcanzar la neutralidad en carbono”.

¿Cuáles son los objetivos deportivos para el Dakar?

“Lo mejor de nuestra estrategia es que no perdemos ni un ápice de competitividad a pesar de haber convertido nuestro proyecto en sostenible. Va a ser un Dakar realmente competido y por eso es difícil pensar en un objetivo realista, pero creemos que tenemos potencial para estar entre los quince primeros. Vamos a darlo todo para lograrlo, y cómo no, aprovecharemos las oportunidades que se nos presenten para llegar incluso a mejorar ese resultado soñado”.

¿En qué se diferencia este coche de los anteriores con los que has corrido en el Dakar?

“Todo el equipo es muy distinto al de otros años. Vamos con otro presupuesto y otro coche, con el que damos un paso adelante. Tenemos una buena aerodinámica gracias al excelente trabajo realizado por la Universidad Nebrija en el diseño de la carrocería, cotas perfectas y una suspensión muy desarrollada. El balance de peso es muy bueno. Tiene un motor muy poderoso y nada menos que 283 kW de potencia. Además, tenemos un sistema de inflado automático que nos facilitará las cosas en las dunas. No vamos mejor preparados por un solo motivo, sino por la suma de muchos”.

El Dakar vuelve a celebrarse en Arabia Saudí un año más, pero tú también corriste en Sudamérica, ¿con cuál de los dos te quedas?

“Creo que el Dakar actual es más divertido. Arabia Saudí es un gran desconocido y, al mismo tiempo, un territorio inmenso. Tienes desierto de todo tipo, con rocas, montañas, pistas rápidas, dunas… Tenemos todo lo que nos encontramos en Sudamérica, pero mucho más variado. El último Dakar en Perú fue 100% dunas y, de alguna forma, eso para mi desvirtuaba el espíritu del rally, que tiene que ser lo más variado posible. 

Arabia Saudí es un sitio que merece la pena ser descubierto desde el punto de vista del paisaje, y creo que los espectadores que siguen el rally han podido ver las montañas y la orografía de un entorno natural muy potente, ideal para una carrera como esta”.

Vuelves a competir con Diego Vallejo, con quien has alcanzado la meta tres veces en el Dakar, ¿cómo es tu relación con él?

“Diego y yo nos hemos hecho muy amigos. Nos conocimos en el Dakar y los dos vivimos las carreras de la forma más profesional posible. Es verdad que ésta no es mi única actividad, pero para Diego sí, y creo que me sabe guiar muy bien. El nivel de confianza es tal que nos hemos dicho cosas en el coche sobre nosotros mismos que poca gente conoce: llegas a un nivel de compromiso y complicidad muy grande. Y eso también cuenta a la hora de conseguir los mejores resultados”.

 

Oscar Fuertes y Diego Vallejo, de nuevo en el Rallye Dakar