Aunque le gustan más las especiales donde se alcanzan grandes velocidades, el finlandés consiguió su primera victoria en WRC en el año 2017 en el Rally de Cerdeña, y terminó la temporada con una tercera posición en el último del año.
En 2017, ¿esperaba ser el mejor piloto con seis victorias de especiales, incluida la Power Stage, en su segundo rally en un WRC?
“Justo antes, en el Rally de Portugal, tenía la sensación de que había que ser perfecto en las notas y en la forma de pilotar para ganar una especial. Entonces pensé que necesitaría más tiempo para dar ese gran paso hacia adelante. También hay que tener en cuenta que en 2017 en Cerdeña, tuve la ventaja de la posición de salida en los tramos el viernes. Las cosas me fueron muy bien entonces, así que espero que puedan volver a serlo este año, ya que me encuentro en una situación similar”.
¿Esperaba hacerlo tan bien en una prueba tan técnica como esta, y que por el momento no se desarrolla en su superficie favorita?
“Honestamente no lo sé. Puede ser que encontrara la clave de ser rápido en esas condiciones. En ese momento, parecía fácil ir por las trazadas sin ir demasiado fuerte, aunque es cierto que esas especiales estrechas no dejan mucho espacio para deslizar el vehículo. Depende de mí seguir con el mismo enfoque. Siempre me ha gustado este rally y no solo por la carrera en sí. Es un lugar magnífico, la gente es muy amable y acogedora, y también disfruto mucho de la cocina local".
Para alguien como usted, que lleva una dieta sin gluten, ¿cuál es el mejor lugar en Alghero para comer una pizza sin gluten?
“En un barco con un buen chef. En los últimos tres años, mi familia y la de James alquilaron un barco justo después del rally para nadar y descansar, y hemos pasado juntos una estupendas vacaciones”.
¿Cuál es su especial favorita?
“Todas tienen algunas características especiales, pero no podría elegir una. La que realmente destaca es Tergu - Osilo, que es donde obtuve mi primera victoria en una especial en 2017. Es diferente porque la pista es muy abrasiva. Es casi como si estuvieras sobre asfalto, así que tienes que ser muy limpio en tu conducción”.
LOS SECRETOS DE CITROËN
Sin prácticamente margen de error, las estrechas pistas del Rally de Italia Cerdeña pueden ser implacables. Sébastien Ogier y Julien Ingrassia aprendieron esto de la manera más difícil en las primeras especiales que disputaban en su carrera con Citroën. Después de hacer su debut con el C2 S1600 como parte del Junior WRC 2008, no regresaron a la prueba hasta 2011, esa vez en un DS3 WRC.
En su primera participación con un WRC en 2009, Sébastien y Julien, a pesar de ser unos recién llegados a ese nivel, tuvieron un positivo comienzo en el rally. Eran quintos en la general en ese momento, por detrás de los cuatro principales, cuando se encontraron con dificultades y tuvieron que abandonar con una suspensión rota en su C4 WRC. En 2010, Sébastien y Julien hicieron una única aparición en el rally, que ese año formaba parte del IRC, cuando un problema técnico los obligó a retirarse. Sin embargo, terminaron con su mala racha el año siguiente, a pesar de un susto cerca del final. Terceros de la general a falta de dos especiales, tras una dura batalla con Mikko Hirvonen y Petter Solberg, el equipo francés golpeó contra una de las muchas piedras sueltas que suele haber en estos tramos, y bajaron al cuarto lugar. Un pequeño contratiempo, que no restó valor a la clara mejora que habían logrado en esa prueba.
