La base de la tercera generación del Nissan Qashqai es la nueva plataforma CMF-C de la Alianza, que ha permitido a diseñadores e ingenieros de Nissan crear un vehículo que consigue satisfacer las exigentes demandas de los clientes en términos de diseño, amplitud, dinámica de marcha y al mismo tiempo limitar al máximo la huella de carbono.
La plataforma CMF-C es una arquitectura completamente nueva, diseñada y desarrollada para garantizar que los vehículos sean competitivos y ofrezcan la experiencia de conducción que los clientes necesitan, en una época de grandes transformaciones en el sector del automóvil.
Carrocería más rígida
En términos de dinámica de conducción, uno de los factores más significativos del rendimiento dinámico es el aumento global de la rigidez de la carrocería del nuevo Qashqai, con una mejora del 48 % en comparación con el modelo saliente. Con una base más rígida, los ingenieros de Nissan han podido ajustar con mayor precisión la dureza de los muelles y los amortiguadores, sabiendo que reaccionan a los cambios de las superficies y no a los movimientos de la plataforma. Esta modificación aumenta la precisión y la respuesta, y reduce las vibraciones.
A pesar del aumento general de rigidez, la carrocería es más de 60 kg más ligera, lo que contribuye a la eficiencia general del nuevo Qashqai, a la vez que reduce la inercia en la conducción, por lo que los conductores notarán la mejora de la agilidad.
Hay dos configuraciones de suspensión trasera, siendo la barra de torsión la configuración para los Qashqai con tracción delantera con llantas de 19 pulgadas o inferiores. La barra de torsión se ha mejorado con respecto al Qashqai saliente, con un nuevo aislante superior en la carrocería que aumenta la rigidez local de la misma y reduce la transmisión de vibraciones al habitáculo. Y la inclusión de un tope mejorado, que contribuye a dotar a la suspensión trasera de un movimiento más flexible y a protegerla de los golpes.
Para maximizar la eficacia de los amortiguadores, se ha modificado su orientación hacia una posición más vertical que reduce la fricción y, por tanto, optimiza su rendimiento, garantizando una mejor absorción de los baches y una conducción más suave, además de proporcionar un mejor control del balanceo.
Los clientes que pidan su Qashqai con llantas de 20 pulgadas o con tracción total disfrutarán de un aplomo y un confort líderes en su clase gracias a la configuración de la suspensión trasera multi-link. La situación de las ruedas con respecto a la carretera permanece optimizada en los cambios de dirección, así como en los cambios de peralte y, sobre todo, en las carreteras con superficies irregulares o bacheadas. La suspensión proporciona una elevada conexión con la carretera, con una respuesta en curva mejorada gracias a un balanceo minimizado y controlado, sin comprometer el confort, mientras que la amortiguación devuelve inmediatamente el coche a una posición uniforme después de las ondulaciones. En ambas configuraciones de suspensión, el aislamiento del ruido de la carretera y las vibraciones sigue siendo uno de los mejores atributos del Qashqai, con un refinamiento comparable al de vehículos de segmentos superiores.
Configuración de la dirección renovada
Los conductores del Qashqai saliente notarán inmediatamente los cambios en la dirección, donde la sensación en la posición recta es más clara y definida. Esto es consecuencia de haber desplazado el motor de asistencia eléctrica directamente junto a la cremallera de la dirección. Dicho cambio ha reducido la sensación de fricción a través del volante, pero ofrece un aumento más natural del esfuerzo de la dirección a medida que se aplica un mayor bloqueo de la misma.
La relación de la dirección ha pasado de 19,1:1 a 14,7:1, lo que se traduce en una respuesta más rápida en los giros. En combinación con el chasis más rígido, los conductores notarán inmediatamente la mejora en la agilidad, aumentando así la sensación de diversión al volante. El radio de giro se mantiene sin cambios en comparación con el modelo saliente: 11,5 m.
Otra ventaja de la plataforma CMF-C es que ha permitido la instalación de llantas de 20 pulgadas, sin que ello afecte al giro de las ruedas delanteras ni comprometa la entrada y salida de las puertas traseras.
Dos innovadoras motorizaciones electrificadas
El Qashqai incluirá dos opciones de motorización diferentes: la de gasolina de 1,3 litros con tecnología Mild Hybrid, disponible en dos niveles de potencia.
El sistema híbrido ligero ALiS (sistema avanzado de baterías de iones de litio) de 12 V disponible para el nuevo Qashqai es una tecnología híbrida que ofrece asistencia de par, parada en ralentí ampliada, arranque rápido y freno motor (solo en versiones con Xtronic), con mejoras tanto en el consumo de combustible como en las emisiones de CO2 (-4 g/km). El sistema híbrido ligero ALiS añade solo 22 kg a la masa total del vehículo.
Al desacelerar, la energía se recupera mediante la regeneración y se guarda en la batería de iones de litio. Esta energía cargada se transmite durante la parada en ralentí, al freno motor (solo versiones Xtronic) y a la asistencia de par.
Al usar el freno motor a velocidades de menos de 18 km/h con frenadas suaves, el motor se apaga y la energía almacenada se utiliza para alimentar el equipo eléctrico del vehículo. Esta función permite prolongar la parada del motor y reducir el consumo de combustible.
Una caja de cambios manual de seis velocidades es la opción de serie para el nuevo Qashqai. Tiene un manejo muy agradable, con relaciones claramente definidas y ajustadas para ofrecer una aceleración notable en las marchas intermedias, con las marchas más altas optimizadas para una conducción silenciosa y eficiente.
La nueva caja de cambios automática Xtronic está diseñada para ofrecer lo mejor de ambos mundos en la conducción diaria. En ciudad, con aperturas parciales del acelerador, la aceleración es fluida, mientras que el régimen del motor se mantiene constante. Cuando se requiere una aceleración inmediata, la caja de cambios encuentra instantáneamente la relación óptima y reacciona de forma escalonada, aportando una sensación de mayor conexión. En cualquier caso, si el conductor prefiere utilizar el cambio en modo manual, siempre tendrá a su alcance las levas del cambio que han sido convenientemente ubicadas detrás del aro del volante para un manejo cómodo y seguro.
El sistema de tracción total se ha mejorado con un nuevo acoplamiento directo que envía la potencia a las ruedas traseras cinco veces más rápido que la generación anterior cuando detecta el deslizamiento de las ruedas delanteras. Y hay más interacción con el conductor gracias a la incorporación de un nuevo selector de modos de conducción en la consola central. Permite al conductor elegir la configuración de la tracción total en función de las condiciones, con los modos Standard, Eco, Sport, Snow y Off-Road.
Tras su presentación inicial, el Qashqai incluirá la innovadora motorización e-Power, que aporta las conocidas ventajas de un vehículo eléctrico, tales como una aceleración lineal sin esfuerzo, y un rendimiento refinado, pero sin la necesidad de recargar electricidad. La batería se carga gracias a un motor turbo de tres cilindros y 1,5 litros de compresión variable que funciona silenciosamente en segundo plano cuando es necesario.
Para dar cabida a esta instalación única, la plataforma CMF-C se diseñó desde el principio para alojar el paquete de baterías en el centro del suelo, pero sin sacrificar el espacio del habitáculo o del maletero.