El Campeonato del Mundo FIA de Resistencia comienza la etapa asiática de la súper temporada 2018-2019, disputando este fin de semana las 6 horas de Fuji, que se celebrarán en dicho circuito de carreras situado a unos 100 km al sureste de Tokio.
Ford ocupa el segundo lugar en el Campeonato Mundial de Constructores de vehículos GTE, mientras que Stefan Mücke y Olivier Pla están en el segundo lugar en el apartado de pilotos, por lo que es vital para el Ford GT nº 66 terminar esta carrera sumando una gran cantidad de puntos. A bordo del Ford GT nº 67, Andy Priaulx y Harry Tincknell esperan continuar con su recuperación tras un comienzo de año difícil, listos para alcanzar también el máximo de puntos en Japón.
"Será bueno volver a correr tras la larga espera desde la carrera de Silverstone", dijo el director del equipo, George Howard-Chappell. “Esperamos un mejor clima que el año pasado porque en 2016 quedó demostrado que la pista de Fuji se adapta realmente a nuestro auto. Esperamos que los coches y los pilotos lleven a cabo una actuación similar a la demostrada en Silverstone. Japón es un gran lugar para competir y la gente es muy amigable y entusiasta. Y, por supuesto, Fuji tiene una gran historia en el automovilismo que siempre marca la diferencia".
En la ronda de Fuji en 2016, Mücke y Pla lograron la primera pole position del WEC para el Ford Chip Ganassi Racing, por lo que se saben rápidos en este circuito. No pudieron demostrar demasiado su velocidad en la ronda de 2017, ya que estuvo marcada con una bandera roja después de 4 horas debido a la poca visibilidad que dejaba la lluvia y la niebla. Para Mücke, el problema se vio agravado por una escobilla rota, que dejó al Ford GT sin poder ver nada a través del parabrisas.
“La carrera del año pasado fue muy interesante para mí", dijo Mücke. “Tuve que mirar por las ventanas laterales para averiguar dónde estaba y juzgar así mis puntos de frenada, lo cual estaba bien al pasar por las curvas, ¡pero bastante duro en la recta principal! Espero que este año no se repita esa situación. Al final nos recuperamos al cuarto lugar pero este año queremos subir al podio y continuar acumulando puntos en la lucha por el campeonato”.
El clima fue tan malo el año pasado que el Monte Fuji, que normalmente llena la vista en la recta principal del circuito, no fue visible durante todo el fin de semana. La competición en sí estuvo inicialmente marcada por una bandera roja tras poco más de una hora para esperar a que la niebla se disipara. Una vez que continuó la acción, los pilotos tuvieron que lidiar con una multitud de coches de seguridad y zonas lentas, así como con muchas estrategias diferentes en juego que hizo muy difícil determinar quién tenía la ventaja.
La carrera de 2017 fue difícil para Priaulx y Tincknell en el Ford GT nº 67. Los ganadores de la ronda japonesa de 2016 terminaron octavos después del contacto que sufrieron con otro vehículo y una penalización de stop-go. Sin embargo, tras terminar en el segundo lugar en la última ronda en Silverstone, el dúo británico espera obtener otro podio en Fuji.
