El fabricante con sede en Mladá Boleslav ha participado activamente en el deporte de motor durante 121 años. Desde entonces ha pasado a la historia con numerosos modelos especiales de competición y de rallyes. En 1946, Skoda se dio a conocer con el modelo 1101, de atractivo diseño y apodado «Tudor», una adaptación fonética checa del adjetivo inglés «two-door» (dos puertas). La demanda de este nuevo modelo creció rápidamente a nivel internacional, especialmente por sus numerosos éxitos en el deporte de motor. El coche participó en el Rallye Rajd Polski de 2.649 km en 1948, así como en el Rallye Sudamericano Montevideo – Melo – Montevideo y en la carrera de circuito en Spa, en Bélgica. En esta prueba, tres modelos cuatro plazas «Tudor» recorrieron 1.972 km en 24 horas y cruzaron juntos la línea de meta.
En el Grand Prix de la República Checa de 1949 en Brno, el Skoda Sport pudo enfrentarse con éxito a la competencia contando con numerosas piezas del vehículo de serie. Posteriormente, el vehículo se adaptó para cumplir el reglamento de la competición de 24 horas de Le Mans. En el circuito de la Sarthe, el equipo de trabajo formado por Václav Bobek y Jaroslav Netušil salió a la pista en la 18ª edición de la carrera, el 24 de junio de 1950.
El Skoda Sport contaba con dos faros delanteros adicionales para las horas nocturnas de la carrera, así como con aberturas especiales en la parrilla del radiador que mejoraban la refrigeración de los frenos de tambor de las ruedas delanteras. Además, la distancia entre ejes del vehículo se había ampliado a 2.150 mm para garantizar una mayor estabilidad en la conducción. Incluso contando con las herramientas y las piezas de repuesto, el vehículo pesaba apenas 700 kg. El vehículo contaba con un motor de cuatro cilindros refrigerado por agua con una cilindrada de 1.089 cm3, y el sistema eléctrico procedía del fabricante checo PAL 12 V. El Skoda Sport ofrecía una potencia de 50 CV a 5.200 rpm montado sobre neumáticos Barum de lonas diagonales. Funcionaba con una mezcla especial de gasolina, etanol y acetona. La velocidad máxima era de 140 km/h, y el consumo de combustible era bajo para su época, con 12 litros a los 100 km. Por ello, los pilotos de Skoda no tenían que repostar tan a menudo como muchos de sus competidores.
Durante las primeras 13 horas de carrera, el equipo de pilotos Bobek/Netusil se abrió camino hasta el segundo puesto con su Skoda Sport en la categoría de menos de 1.100 cm3 y consiguió su sensacional quinto puesto en la general basándose en el coeficiente de potencia. Sin embargo, por un pequeño defecto técnico, el equipo no pudo alcanzar su potencial y el reglamento impidió que se rectificara in situ. En la vuelta 121 de la carrera, se rompió el anillo de pasador del pistón. Según el reglamento, la tripulación solo podía utilizar las piezas de repuesto y las herramientas que tenían a bordo, pero el anillo de seguridad que necesitaban no figuraba entre ellas. Al año siguiente, el fabricante de automóviles tenía previsto sacar al mercado dos Skoda Sports renovados. Sin embargo, las circunstancias políticas no lo permitieron. Por lo tanto, la participación en junio de 1950 sigue siendo hasta hoy la última vez que un vehículo checo con una tripulación checa participaría en la carrera de 24 horas de Le Mans.
Regreso después de 72 años: Le Mans Classic 2022
La carrera de 24 horas de Le Mans se celebró por primera vez en mayo de 1923 y actualmente los vehículos históricos también compiten en el circuito de 13.626 kilómetros cada dos años en el marco de Le Mans Classic. Debido a la pandemia de coronavirus, la presentación del Skoda Sport para celebrar el 70º aniversario de su salida de Le Mans tuvo que ser pospuesta de junio de 2020 a julio de 2022.
El automóvil que había competido anteriormente en las 24 horas de Le Mans de 1950 participó este año por primera vez en la prueba. El Skoda Sport, minuciosamente renovado, fue conducido por Stanislav Kafka y Michal Velebný, el responsable del taller de restauración de Skoda Auto. Su abuelo, Josef Velebný, había diseñado originalmente la carrocería del Skoda Sport. Al igual que en su primera salida en 1950, el coche volvió a salir a la pista este año con el número 44. El segundo de los dos únicos modelos Skoda Sport que se han fabricado participó en el Clásico de Le Mans en 2006.
Michal Velebný comentó al inicio de la carrera Le Mans Classic: “Después de una reconstrucción que ha durado seis años, este año hemos conseguido hacer realidad el proyecto de volver a llevar el Skoda Sport a Le Mans. El vehículo ha sido capaz de hacer frente a un mantenimiento regular y cuidadoso durante un fin de semana difícil, evitando grandes dificultades técnicas. Es una hazaña increíble para nuestro coche, que tiene ya 73 años”.
Se celebran numerosas carreras individuales en Le Mans Classic, y pueden competir los vehículos inscritos de todos los años de construcción, desde 1923 hasta 1981. Los organizadores los dividen en seis grupos básicos y varias categorías especiales. El Skoda Sport se inscribió en la prueba de 2022 en el segundo grupo junto a los vehículos construidos entre 1949 y 1956.
Cada categoría de vehículos compite en tres series de 43 minutos en Le Mans Classic. Después de cada media carrera, los coches entran en boxes para cambiar de piloto. La última etapa comienza con una salida clásica de Le Mans: después de la señal de salida, los pilotos corren hacia sus coches, se ponen al volante, arrancan los motores y salen a la pista.
La bandera a cuadros se ondea a partir del minuto 43 de la carrera, en cuanto el coche más rápido cruza la línea de meta. La clasificación final se determina por el número de vueltas completadas y la diferencia de tiempo entre ellos y el ganador. Las diferentes especificaciones técnicas de los vehículos participantes en las respectivas categorías también se tienen en cuenta en una clasificación separada en la que el factor determinante es un coeficiente especial. En otra clasificación, los vehículos que circularon en los distintos grupos con los correspondientes números de salida se agrupan por equipos.
En la concurrida Clase 2 de vehículos construidos de 1949 a 1956, la tripulación de Stanislav Kafka y Michal Velebný registró un rendimiento sumamente equilibrado en las pruebas de clasificación y de competición. Los checos batieron el récord de rendimiento del vehículo frente a rivales más fuertes o más jóvenes con una conducción técnicamente limpia, lo que les valió para obtener el 47º puesto de 74 participantes en la clasificación general de la categoría. En el ranking recalculado según el coeficiente influido por la potencia y la capacidad del motor, la tripulación checa se situó en la 43ª posición. El Jaguar D-Type de 1954 se hizo con la victoria.
